jueves, 29 de enero de 2009

Childhood

Cuando veo fotos de mi infancia una sensación extraña me visita. Es como si yo no hubiera sido ese niño, me resulta extraño y lejano, pero al mismo tiempo familiar. La familiaridad que reconozco en la sensación no es la misma que experimento cuando por ejemplo veo mi rostro en un espejo, se trata de otro tipo de sentimiento, como si se tratara del retrato de un viejo amigo que no he vuelto a ver. Ángel, ese niño, se fue hace mucho tiempo, la fecha se ha borrado en las marañas de la memoria y hoy solo lo reconozco en la mirada de una madre que busca en mi a su hijo perdido.

Sin embargo, yo soy ese niño, me lo dicen las fotografías y los rasgos comunes de nuestros rostros, me lo dice mi memoria-enmarañada, pero muchas veces transparente-, me lo dicen esos momentos del pasado que se presentan súbitamente en el presente.

Hoy vi Edward Scissorhands. Recuerdo que ese niño pasaba mucho tiempo viendo la Televisión. Le gustaba ver las películas de los fines de semana. Una de sus favoritas era aquella que contaba la historia de Edward el joven manos de tijeras. A este niño lo entristecía mucho esta película, lo entristecía tanto que muchas veces la evitaba. La figura desfigurada de Edward lo inquietaba, no comprendía lo que le pasaba a ese muchacho palido. Cuando pasaba por alguna casa donde algún arbusto estaba podado con la forma de alguna figura peculiar, Ángel pensaba inmediatamente en Edward, y dentro de él hacia sonar la música que muchas veces susurró antes de irse a dormir.

Hay un momento en esa película en el cual Ángel y yo volvemos a ser el mismo. El sentimiento profundo de alegría y dicha que nos despierta es idéntico. Lo veo frente al Televisor con la cabeza sobre las rodillas y sus brazos rodeandole las piernas, viendo fijamente al aparato. Él me ve en el sillón, acomodado como un feto, abrazando una almohada. Los dos sentimos lo mismo, nuestro corazón se regocija ante el bello momento que se nos presenta: Edward esculpe un Ángel de hielo, Kim baila mientras la escarcha cae sobre sus rubios cabellos, la música ocupa la habitación, yo tengo cuatro años de nuevo y él de pronto veinte. La escena termina tragicamente, la parte triste de la película se acerca, de pronto nos desconocemos, él no se imagina que se convertirá en esto y yo no concibo que fuera aquello.



martes, 27 de enero de 2009

¿Puedo?

¿Puedo? ¿Puedo yo pedirte algo? yo que no soy nada mas que eso que tu inventas, que se inventa para que tu lo inventes. ¿Puedo yo pedirte algo? La impotencia que siento ante el tiempo y el temor de ese lugar oscuro al que me llevará, lo insospechado, me obligan a pedirte algo...


Me encontré un poema muy bello. Las cosas pueden permanecer de una forma por siempre. Un retrato o un poema pueden ayudar a que las cosas permanezcan inmutables. Vivimos convencidos de que el futuro nos depara algo mejor, sin embargo, cuando ya vivimos en él, volteamos la mirada tristemente para darnos cuenta que las mejores cosas ya pasaron.




Brise Marine de Joseph Brodsky


Querida, a última hora de la tarde puse un pie en la calle
sólo para inhalar el aire fresco del océano nada distante.
El sol se consumía bajo la ceniza como un abanico chino en una galería
y una nube levantaba su párpado inmenso, como un Steinway.

Hace un cuarto de siglo morías de antojo por los dátiles y el curry del Senegal,
probabas tu voz para la escena, abocetabas perfiles en un bloc.
Coqueteabas conmigo, pero más tarde te amalgamaste con un ingeniero químico
y, a juzgar por tus cartas, te volviste bastante imbécil.

Te han visto en los últimos tiempos en iglesias de la capital y de provincia,
en funerales de nuestros amigos y conocidos, ahora incesantes.
Así y todo, me alegro de que el mundo augure todavía
distancias más inconcebibles que la que nos separa.

Entiéndeme bien: tu cuerpo, tu gorjeo, tu segundo nombre,
ya casi no despiertan nada. No es que hayan dejado de echar brotes;
pero para olvidar una vida un hombre necesita, al menos,
otra vida más. Y yo he gastado mi cuota.

También tuviste suerte: ¿en dónde, si no en una foto,
seguirás siempre sin arrugas, ágil, cáustica, vivaz?
Al dar de cara con la memoria, el tiempo se entera de su impotencia.
Marea baja: fumo en lo oscuro y respiro hediondas algas.
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...Quedate Así

viernes, 23 de enero de 2009

La mujer más bella del mundo

Cuando la vi lo supe. Mi esposa estaba en algun lúgar de Francia esperando por mi. Ella aparece en el minuto 2:49 de este video.



isn't she just lovely?

jueves, 22 de enero de 2009

El curioso caso de Ángel Ramos

A lo largo del camino te encuentras con personas que marcan tu vida. Algunas personas se enamoran a muy temprana edad. Otras hacen tamales. A otras les gusta contar las historias de sus viajes. Otros saben abrir nueces. Hay personas que saben hacer pasteles. Personas que solo tienen a su madre. Hay personas que saben ahorrar. Personas que son madres. Personas que son hermanos. Hay personas que saben de música pero no la pueden tocar. Hay personas que ríen estruendosamente. Otras que saben de café. Hay otras que saben que decir y saben escuchar.



I'm getting Older.

martes, 13 de enero de 2009

2009

El tiempo es el más preciado regalo de dios. Es tan intocable e invisible, el tiempo es incomprensible. Estamos atrapados en momentos que desembocan en momentos que desembocan en otro momento y en otro y en otro y que no desembocan en nada. Cariño, el tiempo es lo único que tenemos y es tan misterioso que a veces pienso que no tengo nada. Ayer le dije a alguien que todo es valioso por que todo tiene un fin. Que somos afortunados de conocernos.

En este blog se traducen canciones.

Muchas canciones son a veces poesías.

En este blog se citan autores latinoamericanos.

Alguien dice que la traducción es una recreación, un juego en el que la fidelidad y la invención se alían.

No te amaré por siempre, pero mientras halla estrellas sobre ti, nunca debes dudarlo, te haré estar muy segura de ello, solo dios sabe donde estaría sin ti.

Si alguna vez me abandonas, aunque la vida continuara, creeme, el mundo ya no podrá enseñarme nada, de lo bien que vivir me hace, solo dios sabe donde estaría sin ti.

Y todo es casualidad. Casualidad que se vuelve causalidad.